En mi desarrollo personal, me he percatado de que hay diferentes formas de expresar lo que pensamos y sentimos. Hay personas que pueden guardar más lo que sienten y, de esta manera, tienden a ser más evitativas, es decir, no expresan sus pensamientos y sentimientos. Al contrario, hay otras que pueden expresarlas de una manera más desmedida y pueden llegar a ser más impulsivas. Todos conocemos personas a las que les cuesta explicar lo que piensan o sienten y no logran plasmarlo con palabras. Sin embargo, hay otras que lo gritan a los cuatro vientos o les resulta muy fácil contar sus emociones a las personas que acaban de conocer.
“… Hay personas que pueden guardar más lo que sienten y, de esta manera, tienden a ser más evitativas, es decir, no expresan sus pensamientos y sentimientos. Al contrario, hay otras que pueden expresarlas de una manera más desmedida y pueden llegar a ser más impulsivas …”
Para entender a la persona que tenemos al lado, es necesario observarla, empatizar con ella y conversar. En otras palabras, debemos conocerla a fondo: saber qué le gusta y qué no le gusta. Con esto, podremos comprender cómo expresa sus pensamientos y sentimientos, lo que nos permitirá no juzgarla tanto, sino comprenderla. Cada individuo tiene su propia historia, y muchas veces aprendemos a través de generación en generación.
Es fundamental crear un entorno familiar libre de juicios para fomentar la comodidad. Asimismo, resulta crucial establecer expectativas claras mediante la definición de acuerdos sobre los límites individuales y la forma de abordar diversas situaciones. La escucha activa desempeña un papel esencial; no se trata solo de expresarse y centrarse en uno mismo, sino de dedicar atención al otro. A través de esta escucha, se potencia el aprendizaje y la comprensión de la situación.
“… El dónde y el cuándo de hablar en familia es vital. Hay que respetar los tiempos de cada uno, porque algunos necesitan más tiempo para procesar y expresar lo que sienten, evitando así cualquier presión innecesaria …”
El dónde y el cuándo de hablar en familia es vital. Hay que respetar los tiempos de cada uno, porque algunos necesitan más tiempo para procesar y expresar lo que sienten, evitando así cualquier presión innecesaria. En la comunicación, el enfoque positivo es esencial. Es recomendable evitar las críticas que no suman y siempre tratar de enfocarnos en lo positivo.
Lo más destacado reside en la búsqueda conjunta de soluciones en lugar de señalar culpables. Más que atribuir culpas, es vital asumir responsabilidades individuales. Este enfoque fomenta la colaboración, fortaleciendo así el sentido de unidad y armonía en la familia.
Aquí te comparto algunas sugerencias de actividades que puedes disfrutar en familia durante este mes de diciembre:
- Diario de Emociones: Motiva a todos en la familia a tener su propio espacio para anotar cómo se sienten durante la semana. Luego, dediquen un día del fin de semana para compartir y hablar al respecto. Pueden utilizar notas en el celular o un cuaderno para plasmar lo que les generó enojo, tristeza, sus preocupaciones o simplemente las cosas por las que se sienten agradecidos.
- Carta de Agradecimiento: Organiza una rifa donde a cada miembro le toque alguien para intercambiar cartas de agradecimiento. Expresen lo que valoran del otro, compartan cosas que nunca han dicho y hablen sobre cómo se sienten en su relación. Es importante que se lean las cartas cara a cara, ya que esto fortalecerá la conexión.
- Actividades en Familia: Disfruten de actividades juntos, como ver una película y luego hablar sobre lo que les gustó y lo que no. Coman juntos sin distracciones y organicen un día especial para hacer algo que todos disfruten.
- Círculo de Elogios: Crear un círculo familiar donde cada miembro comparta cosas que le gustan del otro puede impulsar la autoestima y fomentar la expresión asertiva de emociones.
- Juegos de Cartas de Emociones: Explora juegos de cartas diseñados para expresar y compartir emociones. También puedes crear uno propio, incluyendo tarjetas con diversas emociones. Cada miembro elige una para discutir cómo se siente al respecto.
“… Entender a quienes nos rodean implica observar, empatizar y conversar …”
Entender a quienes nos rodean implica observar, empatizar y conversar. La creación de un ambiente sin juicios, expectativas claras y la práctica de la escucha activa son esenciales. La comunicación positiva, el respeto por los tiempos individuales y la asunción de responsabilidades fortalecen la unidad familiar.
Lic. María del Mar Azpe Soto
Psicopedagoga Universidad Panamericana
Consultas Presencial/Online
Acompañamiento Familiar: Barcelona, España
marimarazpe@gmail.com
