“ Pero tenemos opciones que nos permiten enfrentar los problemas existenciales con fe y esperanza, con voluntad y perseverancia ”
“ al enfrentarlos creceremos en confianza dándonos cuenta de que tenemos recursos para superar el miedo a otras circunstancias adversas ”
Hemos sido vulnerables ante situaciones adversas de la vida que nos ha tocado vivir en los últimos tiempos. Enfrentamos circunstancias con riesgos de perder la vida, durante la pandemia y en los sismos e inundaciones, entre otros. Nos dimos cuenta de que nuestra existencia real “pende de un hilo”, es decir, vivimos en un mundo frágil que no nos asegura una vida de bienestar porque la vida es incierta. Por lo tanto, somos vulnerables y sufrimos las consecuencias adversas a nuestro sentido de vida plena. Pero tenemos opciones que nos permiten enfrentar los problemas existenciales con fe y esperanza, con voluntad y perseverancia. Es necesario aceptar, convirtiendo los traumas dolorosos en estado de crecimiento personal quitando los miedos y las inseguridades. Se trata de fortalecer nuestra personalidad creciendo ante las circunstancias adversas, enfrentando a los retos con valor, con conciencia y voluntad teniendo disposición asertiva para hacerle frente a los riesgos. Al enfrentarlos lograremos sentirnos más seguros y confiados. Dice el dicho popular: “no hay mal que por bien no venga” y es correcto, porque al enfrentarlos creceremos en confianza dándonos cuenta de que tenemos recursos para superar el miedo a otras circunstancias adversas. Si crecemos ante los retos y riesgos de la vida lograremos poder enfrentarnos a otros para nuestro bien y de nuestra familia y por qué no, de nuestra sociedad. Después del primer éxito sentiremos la satisfacción y tranquilidad para poder enfrentar otros retos con menos dificultades personales. Estos hechos se convierten en la capacidad de superación individual o grupal convirtiéndose en un proceso vital que se adquiere para resolver problemas de grupos, de familia o de la sociedad, aportando seguridad y confianza a las personas que lo integran. Al modificar los malos hábitos nuestras vidas serán más productivas y generosas. Los cambios de la personalidad producen crecimiento en la plasticidad yoica de las personas a nivel emocional, mental, social y espiritual. Si nos fortalecemos el sufrimiento se apaga porque no es bienvenido en nuestra vida ya que al rechazarlo lo transformamos en experiencia de vida positiva. Si nos enfrentamos con valor y decisión de cambios, todo se acomoda a nuestro convivir. No hay nada en el mundo que nos capacite como el hecho de sobreponerse a las dificultades externas y a las limitaciones internas cuando tenemos conciencia de poseer una tarea de cambiar para mejorar nuestra vida.
“ Al modificar los malos hábitos nuestras vidas serán más productivas y generosas ”
Duele, pero incluso si has vivido experiencias terribles, siempre es posible volver a recorrer el camino que te lleva a la felicidad. Tienes en tus manos herramientas valiosas como los vínculos que creaste a tu alrededor. La fuerza está dentro de ti. Autor: Boris Cyrulnik
Dr. Carlos A. Barreto Rivero
Psicólogo Clínico y Psicoterapeuta
Cbarreto82@yahoo.com.mx
Tels. 662 154 0484 – 662 214 9554